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Jorge Luis Borges - La Biblioteca de Babel

Material para aprender español  •  En Literatura

Jorge Luis Borges (Buenos Aires, 1899 - Ginebra, Suiza, 1986) nace en el seno de una familia culta y acomodada, algo que influiría en gran medida en su formación intelectual y artística. Pasa parte de su infancia y juventud en Europa, lo que le permite aumentar su ya vasta cultura literaria, pues empieza a mostrar un gran interés en la lectura y en el aprendizaje de lenguas extranjeras siendo solo un niño.


A su regreso a Buenos Aires, en 1921, comienza a publicar poemas y ensayos en varias revistas literarias, al tiempo que trabaja como bibliotecario, conferenciante y profesor de literatura inglesa. Metido de lleno en los círculos intelectuales de la época, Borges va convirtiéndose poco a poco en una figura clave de la vanguardia literaria argentina.


La obra de Borges es vasta, ya que incluye cuentos, ensayos y poesía. Ni siquiera su ceguera crónica y progresiva impidió que siguiera creando. En todos los géneros que cultiva, destaca por su erudición, al igual que por un intenso componente de fantasía y de exploración de temas filosóficos.


A lo largo de su extensa carrera, el argentino recibe numerosos reconocimientos internacionales, entre ellos el Premio Cervantes (1979), el más prestigioso entre los autores en castellano. A pesar de esto, el hecho de que no le fuera otorgado nunca el Nobel de Literatura sigue siendo objeto de debate en muchos círculos.


Aunque todas sus creaciones son relevantes, sobresalen sus relatos, en los que combina conceptos propios de la filosofía con otros de carácter histórico y literario. En sus cuentos, Borges usa un estilo narrativo conciso e innovador al mismo tiempo, al incluir elementos como la metaficción y la intertextualidad. Estas características lo convertirían en precursor de lo que posteriormente se llamaría literatura posmoderna.


La Biblioteca de Babel


En obras tan notorias como Ficciones (1944) y El Aleph (1949), el argentino explora temas recurrentes, tales como el infinito, el tiempo, el espacio o la identidad. En Ficciones se incluye el cuento La Biblioteca de Babel (1941), un relato fantástico en el que el autor imagina un universo en forma de una biblioteca infinita, compuesta por numerosas galerías hexagonales e idénticas. Los libros que llenan esas galerías tienen una peculiaridad: contienen todas las posibles combinaciones de caracteres en todos los idiomas, lo que significa que se pueden encontrar todos los tipos de textos posibles, algunos coherentes y otros totalmente caóticos y sin sentido. Esta dificultad hace que la búsqueda de la verdad sea una tarea desesperante para el hombre, tal y como lo es para el bibliotecario en ese espacio sin fin del que se ocupa.


La Biblioteca de Babel es, en definitiva, una reflexión sobre lo infinito y sobre la incapacidad del ser humano para encontrar respuestas claras ante la vastedad de información existente. Con esta metáfora, Borges explora cuestiones como el azar, el orden o el lenguaje.


A continuación, presentamos las primeras líneas del relato:


El universo (que otros llaman la Biblioteca) se compone de un número indefinido, y tal vez infinito, de galerías hexagonales, con vastos pozos de ventilación en el medio, cercados por barandas bajísimas. Desde cualquier hexágono se ven los pisos inferiores y superiores: interminablemente.


La distribución de las galerías es invariable. Veinte anaqueles, a cinco largos anaqueles por lado, cubren todos los lados menos dos; su altura, que es la de dos pisos, excede apenas la de un bibliotecario normal. Una de las caras libres da a un angosto zaguán, que desemboca en otra galería, idéntica a la primera y a todas.